El PNP me impresiono porque de la noche a la mañana
se levantaron y causaron un gran impacto. Estaban mejor preparados de lo que
pensé. Es por eso que considero cierto el dicho que dice que no se puede
subestimar a nadie. Desde el momento que entré al salón, por la decoración, se
sabía que ellos no lo habían tomado a juego. Que se habían preparado y estaban
listos para dar lo mejor de ellos. Hay que recordar que estábamos haciendo una
campaña de candidatura y no de estatus. El PNP hablo mucho de los beneficios de
la estadidad y lo lindo que sonaban sus propuestas con el dinero de Estados
Unidos pero la realidad del asunto es que si ellos ganaban las elecciones nada
de eso iba a ser posible porque no iban a cambiar el estatus y tenían que
bregar con los fondos que tenemos no con los de Estados Unidos. Algo que me
causo mucha gracia fue una propuesta de la candidata a la alcaldía que de San
Juan que propuso enseñarles ingles a las personas de pequeños comercios del
viejo San Juan. Me imagine a los piragüeros y a los que venden algodones de
azúcar en un salón de clases aprendiendo inglés. No entiendo como esto ayudaría
al país ya que tu le dices a un piragüero “One Tamarindo” y el entiende. En
este partido, al igual que el PPD se vio que hubo integrantes del grupo que no
hicieron nada y eso se notaba.
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